top of page

DÍA 9 CAMPUS OLÍMPICO CANGAS 2016. LA MAR DE DULCE.


La playa de la arena en Soto de Barco fue el punto de encuentro para los surfistas del campus. El día grisáceo no pintaba bien. Pero con el paso de las horas el sol hizo su aparición. Llega el momento de lucir escultura. Los cuerpos jóvenes se van modelando. El marco natural de la playa proporciona este pose demoledor.

La bandera amarilla por el estado de la mar bravía resulto propicia para la experiencia surfera. Novatos y duchos se zambullen en busca de la ola buena que les lleve a la orilla. Con más o menos destreza, tras seguir los consejos pertinentes de los empleados de la empresa rompiente Norte.

Cansados, abatidos por el fuerte oleaje se afanan en subirse a la tabla. Unos lo intenten y otros lo consiguen. Los primeros se mantienen en equilibrio y llegan a la arena sin caerse. Los segundos deciden abandonar tras intentos fallidos por superarlo.

Llega el momento de agruparse. Los amigos más próximos. Los compañeros del alma. Torsos al viento con la sonrisa en la cara.

Por otra parte, las chicas no quieren ser menos. Surfeando sobre una ola imaginaría, todas a una, juntitas, agrupadas para no caerse tras su sacudida.Rotas la separación de poderes, chicos y chicas integrados en busca de una imagen lo más dulce posible.

Mientras tanto, el trabajo en Cangas no cesa.Los ensayos en el ejercicio de cintas y pelota se multiplican, Coordinar ambos elementos requiere tiempo, esfuerzo y mucha dedicación. Lo mismo que les sucede a las más pequeñas de pienso en rítmica que ensayan sin parar su coreografía final y cierre del ejercicio.

El baloncesto, protagonista del campus sigue siendo la pieza motora del mismo. La entrada a aro pasado resulta un ejercicio de lo más practicado por parte de todos los asistentes al campus.

Los ejercicios en el gimnasio del palacio municipal de deportes completan las intensas jornadas de entrenamiento de los distintos grupos presentes en el campus..


bottom of page